Desde que leí "Born to Run" de C. McDougall, decidí que correr era para mí. Antes de eso ya había empezado a caminar, trotar y andar. Cuando niño, nunca hice ejercicio alguno, siempre los evité porque soy asmático. Así, que a los treinta y tantos comencé a caminar. Lo hacía a manera de relajante para después de una jornada de estrés; como un espacio para encontrarme sólo y conmigo mismo; como un ritual para contactar la naturaleza.
Como todo, comienzas caminando unos minutos, luego media hora, luego quieres trotar; finalmente comienzas a correr unas cuadras, y así vas... hasta que en 2013 participé en una carrera 10k. Es electrizante participar en un evento de éste tipo, pues 15mil tipos trotando sobre un lugar bello y moviendo la ciudad te da una sensación única y poderosa.
Durante el 2014 participé en otras carreras, de varios tipos. Los trail son mis favoritos, pues me siento más en armonía con el mundo y la naturaleza. No dejo de ser un montañés... En fin. A la vez que entrenaba para otra carrera y una meta nueva, iba bajando de peso. Bajaba paulatinamente, a pesar del feroz apetito que me daba. Comencé el 2015 con la intensión de bajar de peso asistido por un especialista en nutrición, pues no quiero llegar a los 40 con las rodillas molidas por mi sobrepeso, ni toparme con un infarto por exceso de esfuerzo. Comprendí que si bajaba de peso con un plan de alimentación podría ser más ágil, a la vez que desarrollaría músculo, protegería mi corazón y sentirme más sano.
Así, que busqué en internet, un nutriólogo que tuviera algún contacto con el vegetarianismo... Entre paréntesis, soy vegetariano (lacto - vegetariano) desde mi infancia. Agrego también, que soy el único loco en mi familia que no come carne; a la vez que comento que no se me antoja, nunca me gusto y me satisfago bien con verduras, frutas y cereales. (Perdón, pero es el pack de preguntas clásicas que todos me arrojan cuando digo que soy vegetariano). No pienso dejar de ser vegetariano, pues no me atrae comer carne; tampoco creo que sea un camino para todos, ni lo aconsejo, pero ese ha sido mi camino. También debo confesar, que ser vegano lo veo más "clavado" y rudo.
Busqué en internet un especialista, regreso al tema, en nutrición que tuviera algún contacto o experiencia en vegetarianismo. Encontré una Nutrióloga que ha dado conferencias sobre los mitos y que parecía más receptiva a un paciente como yo. Además, no me quedaba ni lejos ni me parecía mal. Saqué cita, asistí y llevo poco más de 3 meses con un plan nutricional que ha ido variando y ajustando a diferentes circunstancias, pero que ha dado un resultado fenomenal, pues he perdido hasta ahora casi 15kg. Aún cuando he ganado músculo, el peso absoluto ha bajado.
Decidí escribir unas líneas al respecto pues quiero, en la intimidad de un blog público que sólo ha tenido 300 visitas en 3 años, comentar que me he sentido sano, vigoroso, fuerte, y casi diría que en "homeóstasis". Mis análisis de laboratorio vaticinan salud. El cardiólogo dice que tengo una condición superior al promedio y mejor que lo que esperaría para mi edad. El maratón que quiero correr, está a 4 semanas, mi primer maratón. Así, que a seguir con el plan de nutrición y a correr, correr y correr mucho más.
Comentarios
Publicar un comentario